Se creó un consenso acerca de la necesidad de unirse con otros grupos de agricultores, en torno al interés del cambio y del desarrollo de tecnologías alternativas. En otras comunidades se organizaron evaluaciones similares y, en 1985, se llevaron a cabo cuatro conferencias de seguimiento ‘BIGAS’, tres a nivel regional y una conferencia nacional. Allí, los agricultores describieron sus experiencias negativas con variedades de alto rendimiento y con tecnologías relacionadas, y los programas pudieron recomendar alternativas (Modina y Ridao, 1987). En 1986, se estableció en Jaen, Nueva Écija, el Centro MASIPAG (Mga Magsasaka at Siyentipiko para sa Pagpapaunlad ng Pang-agrikulturang Agham / Agricultores y Científicos para el Desarrollo de las Ciencias Agrícolas). Facilitado por la Fundación ACES, comenzó a cooperar con los agricultores en ocho comunidades donde actuaba DIWA. Este Centro fue el primero de los trece previstos para las diferentes provincias, que tenían como meta estimular las organizaciones de base. Su programa fue diseñado para incrementar una cooperación directa entre agricultores, científicos y personal de desarrollo. MASIPAG se concentró en recolectar y evaluar variedades tradicionales de arroz, hacer cruces de variedades tradicionales mejoradas apropiadas para el suelo y el clima local, llevar a cabo un manejo alternativo de plagas usando trampas producidas localmente, usar pesticidas biológicos, seleccionar variedades resistentes y diversificar técnicas agrícolas, practicar agricultura orgánica con fertilizantes orgánicos y capacitar a los agricultores en mejoramiento de arroz y en documentación. Los agricultores establecieron bancos comunales de semillas en fincas, administrados por cada federación, y, al mismo tiempo, mantuvieron por lo menos cinco variedades en sus propias fincas. Las variedades no solamente fueron caracterizadas y multiplicadas, sino que también estuvieron sujetas a ensayos de adaptabilidad. Los agricultores interesados eligieron cepas madre del fondo de variedades localmente adaptadas para cruzarlas y, después de algo de entrenamiento, pudieron hacer sus propios cruces (Basilio, Razon y Estrella, pronto a ser publicado). La participación de KADAMA en el programa MASIPAG y el apoyo de la Fundación ACES terminó en 1994. Ahora, MASIPAG se concentra en Mindanao y Negros, donde tiene mucho éxito. |
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Un nuevo impulso | |
Doce miembros comenzaron a probar el paquete MASIPAG. Este consistió en variedades tradicionales nativas y variedades nativas mejoradas de arroz, estiércol de ave (a una tasa de 90 sacos, es decir, 4.500 kg por hectárea), siembra directa (40 x 40) en dirección Este-Oeste y de 2 a 3 plántulas por hoyo. Después de algunas temporadas agrícolas, aproximadamente 200 agricultores participaban en los ensayos.
La Federación KADAMA tenía como meta incrementar la cooperación entre los agricultores, difundir el uso de la tecnología MASIPAG y organizar la comercialización del arroz MASIPAG. Sin embargo, la comercialización no tuvo éxito; los agricultores se vieron forzados a vender su arroz a comerciantes locales quienes pagaban precios menores por las variedades tradicionales de arroz y por las variedades nativas mejoradas. Por este problema y porque no había garantía para las cosechas de los agricultores, muchos miembros de KADAMA perdieron interés, aún cuando sus costos de producción fueron menores y no había efectos negativos para el entorno o para la comunidad. Sin embargo, algunos de los agricultores más motivados continuaron usando fertilizantes orgánicos y variedades nativas mejoradas de arroz. En 1996, el Programa de Investigación de ILEIA dio un nuevo impulso a la experimentación con producción alternativa / LEISA de arroz. Los experimentos de DPT demostraron fehacientemente que el manejo de la fertilidad de la tierra con estiércol de ave produce resultados equivalentes a las prácticas locales basadas en fertilizantes químicos, a menor costo (ver Abon, p. 29). Las variedades tradicionales mejoradas de arroz probaron ser tan productivas como las variedades de alto rendimiento comúnmente usadas. KADAMA da alta prioridad a recrear la biodiversidad perdida a través de la producción de arroz y ha lanzado una nueva selección de variedades tradicionales mejoradas e iniciativas de mejoramiento. Piensa continuar con experimentos de DPT sobre el manejo de la fertilidad de la tierra y los nuevos enfoques, tales como el sistema de intensificación de arroz, desarrollado en Madagascar (ver el Boletín de ILEIA Vol. 5, Nos. 3 y 4, diciembre 1999). |
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Resumido de: Melencio F. Razon, Domingo S. Ramos, Victoriano Bautista, Aurelio P. Estrella, 1999. The evolution of sustainable agriculture in the KADAMA organisation. Informe interno del Programa de Investigación de ILEIA. KADAMA, 30 Bernardo District, Cabanatuan City, Nueva Écija, Luzón Central, Filipinas. |
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Referencias – Basilio CS, Razon MF y Estrella A, 1999 (pronto a ser publicado). Searching for seeds of freedom: plant genetic resource utilisation and conservation by KADAMA farmers’ confederation. – Modina RB y Ridao AR, 1987. IRRI rice: the miracle that never was. ACES Foundation Inc. Quezon City, 140 páginas. |
enero 2000, Volumen 15, Número 1-2
Encontrando bases comunes (número doble)
Kadama: Recreando la biodiversidad perdida
MELENCIO F. RAZON, DOMINGO S. RAMOS, VICTORIANO BAUTISTA, AURELIO P. ESTRELLA | PáginaMás artículos
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