A fines del año 1999, surge la Asociación Civil “Grupo de Ayuda a Familias Productoras de Cañuelas” con sede en el Barrio “La Garita” de Cañuelas, que obtiene su personería jurídica en el año 2001. En este contexto, y a raíz de la crisis económica y social que comenzó a fines de los años noventa y que se agudiza a principios del año 2001, se acrecienta la necesidad de generar alternativas de supervivencia. Esta organización no gubernamental se formó de manera espontánea por la necesidad urgente de algunos pobladores de la zona de llevar alimento a sus casas, quienes se propusieron juntar manos y esfuerzos para enfrentar los problemas económicos y sociales que estaban sucediendo en el país. Así, tomaron como ejes de acción el trabajo conjunto y la organización social. Posteriormente, en el año 2003, muchos de sus integrantes conformaron la “Cooperativa Agropecuaria de Productores Familiares de Cañuelas Ltda.” basada en los mismos principios.
Luego de ocho años recorridos, el grupo cuenta con una trayectoria de trabajo en la comunidad y tiene como principales lineamientos la organización, la educación y la salud, que se sustentan en la producción agroecológica, el comercio justo y la soberanía alimentaria.
¿Quiénes construyen estos espacios y cómo?
El grupo está formado por las familias rurales de la zona, las cuales son propietarias de pequeñas extensiones de tierra, que oscilan entre los 100 m2 en las zonas periurbanas, y otras extensiones más amplias de hasta cinco hectáreas en la zona rural. Estos agroecosistemas familiares se basan en una alta diversidad productiva, manejada con tecnologías apropiadas. Muchas de estas tecnologías son generadas localmente, atendiendo el cuidado del ambiente y de los recursos naturales. Los productos que obtienen son de calidad agroecológica.
La diversificación está basada en la crianza de animales de granja (cerdos, pollos, gallinas, patos, gansos, ovejas, cabras, conejos), tambo (establecimiento ganadero destinado al ordeño de vacas y a la venta, generalmente, al por mayor, de su leche), horticultura (huerta orgánica, aromáticas y medicinales), floricultura y apicultura.
También se elaboran productos como licores, quesos, conservas dulces y saladas. La producción obtenida se utiliza para el autoconsumo y el excedente se comercializa entre los vecinos y en mercados regionales. A su vez, se realiza de manera asociativa la siembra de especies forrajeras y cereales, para su posterior procesamiento en una planta de alimentos comunitaria.
El trabajo se fundamenta en el apoyo y fortalecimiento de las actividades de la organización. La estrategia productiva consiste en obtener diversidad de productos con calidad agroecológica, prevaleciendo el valor de uso sobre el valor de cambio. Al mismo tiempo, se hace hincapié en el manejo técnico-productivo, en la producción colectiva de insumos, y en la promoción del consumo responsable y la soberanía alimentaria.
El camino andado en la gestión comunitaria
Los productores tienen como eje esencial y transversal la organización, la cual dinamiza al resto de actividades y les permite subsistir como agricultores familiares.
A través de ello han logrado llevar adelante su proyecto de cooperativa. A su vez, la gestión participativa con diferentes instituciones públicas y privadas permitió grandes logros. Los proyectos concretados permiten visualizar un desarrollo en la comunidad. En ese camino se ha trabajado con el Ministerio de Desarrollo Social y el Ministerio de Producción, tanto de la nación como de la provincia de Buenos Aires. También con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), entidades que han brindado apoyo técnico en las diferentes áreas. También los agricultores de Cañuelas trabajan con otras organizaciones de productores familiares, con las cuales no solo los une la amistad y el trabajo, sino la convicción de pensar un modelo de país diferente.
Resultados de la gestión
A través de la interrelación y del trabajo solidario, la organización cuenta hoy con un molino casero pequeño y con dos silos pequeños; el molino –construido por el grupo– es para moler granos y pasto. También cuentan con un tractor, una enfardadora, y otras herramientas generalmente recicladas para su uso en agricultura.
Molienda de maíz en el molino comunitario / Foto: autores
A partir de las relaciones con las instituciones y el trabajo participativo, se han elaborado varios proyectos. Actualmente, se están impulsando cinco proyectos que apuntan a fortalecer los encadenamientos productivos como parte del desarrollo. Asimismo, se ha logrado que uno de ellos sea patrocinado por el Municipio de Cañuelas. En el ámbito de la educación, junto al Ministerio de Educación de la provincia de Buenos Aires, se impulsó y concretó la apertura de un Centro Educativo para la Producción Total (CEPT) en Cañuelas. Esta escuela rural de alternancia, se basa en la autogestión y una propuesta educativa construida por la comunidad rural, con las familias como actores principales de la propuesta.
Otros espacios de acción y participación del grupo
En 2001, la organización participó de la conformación de la Mesa Provincial de Organizaciones de Productores Familiares de Buenos Aires, que hasta el día de hoy continúa trabajando activamente. Desde este espacio de construcción, se reclamó y logró la conformación de un Instituto de Investigación para la Pequeña Agricultura Familiar, dentro del INTA, ya que hasta ese momento este organismo nacional no tenía una línea de investigación que contemplase este sector productivo. En otras instancias se participó en la organización de la primera y segunda versión de la Fiesta Provincial de Semillas Nativas y Criollas de la Provincia de Buenos Aires. En estos espacios se presentaron, ante las autoridades Municipales y Nacionales, documentos con propuestas de políticas públicas y legislativas que acompañen el desarrollo de la Agricultura Familiar.
A nivel latinoamericano, la organización es parte del MAELA (Movimiento Agroecológico de América Latina y el Caribe) espacio de investigación, capacitación e intercambio de experiencias a nivel nacional e internacional, donde se trabajan, entre otros temas, la construcción de propuestas de legislación en los países de América Latina. En 2006, en Nicaragua, se realizó la Asamblea y Encuentro de Agroecología del MAELA, donde Familias Productoras de Cañuelas –junto a otras tres organizaciones– representaron a la Argentina.
Dificultades de la autogestión
En Argentina, hace un par de años, se elaboraron políticas orientadas al sector de la agricultura familiar con la intención de propiciar la inclusión y la participación de todos sus actores. Sin embargo, el retraso en su implementación y concreción generó un gran desgaste e incredulidad de parte de las familias productoras. Esta situación afectó la organización y las relaciones con los sectores del Estado, ya que los proyectos que se habían formulado y propuesto no se implementaron.
A pesar de lo vivido, la organización de productores, por su resiliencia y capacidad de respuesta, vuelve a armarse, organizarse y a realizar gestiones junto a instituciones estatales que parecen tener un compromiso más fuerte con el sector, generando una nueva oportunidad de formulación de políticas en forma conjunta.
Próximos pasos
No son pocos los logros obtenidos, pero todavía hay mucho por hacer. En este camino, los próximos pasos son, por un lado, continuar con la gestión para obtener infraestructuras productivas (salas de faena, salas de elaboración de alimentos, salas de fabricación de alimentos balanceados), colectivas y regionales, administradas por los mismos productores, y que apunten al desarrollo del territorio. A su vez, fomentar, impulsar y construir organización y estrategias en el marco de la economía social solidaria. Por último, pero no menos importante, seguir trabajando en la construcción de políticas inclusivas que consideren a la agricultura familiar como un sector estratégico dentro de un nuevo modelo de país.
Familias Productoras de Cañuelas cree y defiende que la apropiación del papel que cumplen en la sociedad, y para ella, es el motor que los mantiene en la lucha constante por valorar el significado de la agricultura familiar y dignificar su función social.
Agradecimientos
A todos los productores familiares de Cañuelas que, con su esfuerzo, perseverancia y creatividad, mantienen viva esta experiencia.
Alicia Alem, Elida Turco, Guido Principi y Margarita Bonicatto
Alicia Alem
Cooperativa Agropecuaria de Productores Familiares de Cañuelas Ltda.
Correo electrónico: aliciafpc@gmail.com
Elida Turco
ProHuerta INTA
Correo electrónico: elidaturco@yahoo.com.ar
Guido Principi
Programa Cambio Rural Bonaerense del Ministerio de Asuntos Agrarios y Producción de la Provincia de Buenos Aires.
Correo electrónico: gmprincipi@gmail.com
Margarita Bonicatto
Cátedra de Agroecología. Facultad de Ciencia Agrarias y Forestales. UNLP. Correo electrónico: mbonicatto@yahoo.com.ar