Un especialista en comunicación de Filipinas comenta la estrategia de ILEIA. El autor y dos colegas de la Universidad de Filipinas en Los Baños ayudaron a ILEIA a organizar varias discusiones en grupo para obtener retroalimentación de sus lectores en el Boletín ILEIA.
El documento de estrategia describe una intrépida y ambiciosa empresa. En este punto no puedo decir que estoy completamente satisfecha con la estrategia de ILEIA, la que plantea determinar durante los próximos tres años el potencial y las limitaciones de la agricultura ecológica. ¿Cómo puede ser esto posible cuando los detalles evolucionan a través de un proceso interactivo, con por lo menos tres grupos grandes en tres países como participantes directos, y mientras los métodos de evaluación e intercambio de información tienen que ser elaborados a medida de la realidad de cada grupo? El punto central está en el agricultor pobre en recursos, quien es el actor principal y aprendiz y desde cuyo punto de vista debe iniciarse el proceso. Sin embargo, esto no es el elemento innovador de la estrategia. De hecho, otros han intentado hacer lo mismo pero confundieron el objetivo. Si se desea que el plan tenga éxito, ILEIA no debería perder de vista al agricultor marginal.
Existe además el peligro de que ILEIA y sus socios de los países desarrollados sean percibidos como los que acaparan toda la atención. La posesión de información, conocimientos y experiencia resulta a veces un tema espinoso entre los investigadores y ONG del Sur en comparación con las del Norte. Pero, una vez más, no es menos probable dentro de un país o grupo, esté éste en el Norte o en el Sur.
Mi percepción sobre la estrategia es que ILEIA y sus socios tratan de recopilar y clasificar lo que se conoce sobre agricultura ecológica, unir estos elementos bajo diferentes formas de combinación, probar las mezclas en el terreno, recoger las que resulten viables de acuerdo con los criterios de los agricultores, extrapolarlas a una mayor escala, y luego dar el primer paso hacia su utilización de manera más sencilla. De ser mayormente un destilador y difusor de investigación y práctica realizados por otros acerca de bajos insumos externos y agricultura sostenible, ILEIA también quiere facilitar la investigación en la práctica.
Papel difundido
ILEIA va a arriesgarse a salir de su posición estrictamente intermediaria en la cadena de uso, intercambio y generación del conocimiento agrícola, y asumir el riesgo de reivindicaciones de áreas pobres de izquierda y de derecha. Este es un gran reto que usualmente no ha sido asumido de manera exitosa excepto por unas pocas instituciones, como los institutos de subvención agraria de Estados Unidos. Los institutos agrarios en Filipinas no han tenido tanto éxito, en parte debido a las grandes demandas de enseñanza e investigación en-aulas pero principalmente debido a una antigua política que les prohíbe el trabajo de extensión activo en el campo. Esta limitación fue efectivamente suprimida al devolver el gobierno central la función de extensión a las autoridades de gobierno local, pero las escuelas agrarias han tenido una lenta respuesta ante la oportunidad creada.
Podría ser que una organización con participación como ILEIA, trabajando estrechamente con sus socios y guiada por el marco conceptual apropiado, pueda fusionar acertadamente desarrollo y utilización de tecnología. Indudablemente podría ser una manera de demostrar el dicho, a menudo mencionado pero pocas veces llevado a cabo, que la investigación y la extensión son parte del mismo proceso. De hecho, la estrategia puede minar modelos lineales de sistemas de conocimiento agrícola en favor de las interacciones más dinámicas de los sistemas cíclicos.
Círculos de comunicación
El ILEIA en transición desea usar su boletín, un medio especializado de comunicación de masas, más bien como un foro en donde la opinión, el conocimiento y la información puedan ser presentados, cuestionados y discutidos por sus lectores. Lo que es único en el plan -que puede lograr que un foro interactivo sea una real posibilidad– es que a través de sus grupos de socios agricultores, de científicos y de ONG, ILEIA estará virtualmente vinculado además a varias redes interpersonales nacionales y locales en cada país en donde existe un centro piloto. Estos grupos tienen sus propios canales o medios de comunicación en donde los temas sobre agricultura ecológica podrían volver a tratarse y ser localizados.
Una visión de red global con múltiples niveles y canales que conduzcan el debate sobre agricultura sostenible es utópico, está mucho más en el reino de la fantasía. No obstante, vale la pena esforzarse por este ideal. Es importante, entonces, que los círculos de comunicación de los agricultores, ONG y científicos en cada país piloto sean promovidos y acoplados como parte de la red ILEIA. Esto quiere decir que los talleres dentro del campo y otras formas de interacción cara a cara, dentro de los grupos y a través de estos, posiblemente coauspiciados por ILEIA, deberían ser vistos como jurisdicciones legítimas no sólo para defender la agricultura ecológica sino también para compilar la retroalimentación de los participantes.
Durante el proceso de aprendizaje, los socios de ILEIA no son sólo lectores individuales sino también organizaciones formales: grupos de agricultores, ONG, universidades, unidades de investigación y extensión. Cuando ILEIA hace el seguimiento de la opinión del lector a través de grupos centrados en temas específicos o entrevistas grupales, parecería lógico que sus organizaciones de socios asistieran. Las organizaciones socias de ILEIA en los centros pilotos y otras como las que integran a los lectores del Boletín ILEIA. En términos de alcance estratégico, se les puede comparar con una serie de círculos concéntricos que se van ampliando. Los socios de ILEIA se ubican cerca al núcleo. Es más fácil acceder a ellos y muy probablemente puedan contribuir con retroalimentación detallada. La búsqueda de su opinión e información sobre variaciones de opinión acerca del Boletín ILEIA o sobre la estrategia, podría hacerse de manera productiva a través de discusiones de grupo sobre temas específicos o entrevistas grupales. Estas entrevistas no deben ser vistas como separadas o distintas de las actividades de aprendizaje diseñadas para los socios de ILEIA. Se les puede programar para que coincidan con estas actividades y se puedan hacer de manera conjunta con los socios.
Los otros lectores, que son más anónimos, están más cerca a la periferia de los círculos concéntricos. Usualmente, ellos requieren mayor trabajo de convencimiento para participar en ejercicios de retroalimentación. Como su información también es valiosa, esta podría ser mejor aprovechada a través de encuestas convencionales.
Discusión en grupo para buscar las opiniones de los lectores del Boletín en Filipinas
A finales de 1995, a solicitud de ILEIA, tres plantas docentes del Institute of Development Communication (Instituto de Comunicación para el Desarrollo), Universidad de Filipinas, Los Baños, pusieron a prueba discusiones centrales de grupo como una manera de escuchar la opinión que los lectores del Boletín ILEIA tenían sobre la publicación. Las discusiones centrales en grupo comúnmente se utilizan en mercadeo para obtener así retroalimentación e impresiones de los usuarios de un producto. Para ILEIA, el crear un canal de comunicación con los lectores fue un experimento. En 1992 ILEIA había hecho un seguimiento sobre el uso e impacto del boletín a través de cuestionarios enviados a lectores en 31 países. Esta vez, ILEIA quería un método complementario que pudiera suministrarle retroalimentación cualitativa y que pudiera ser utilizado más a menudo. A pesar de que se obtuvo retroalimentación valiosa, hubo dificultades para conseguir el número suficiente de participantes en las sesiones.
Guardianes del intercambio de información
Ya sea que el foro de retroalimentación sea conducido a través de medios indirectos o cara a cara, la Unidad de Comunicación e Información de ILEIA, así como sus comunicadores asociados de desarrollo en el campo, sirven como moderador, monitor, vinculador, intérprete y facilitador. Aquí se utiliza el término «comunicador del desarrollo» en un sentido genérico: que incluye pero que no está limitado a personas de los medios de comunicación. Los extensionistas están calificados para esta labor al igual que otros guardianes del acto de intercambio de información.
Como guardianes del intercambio de información, los comunicadores también pueden participar en la investigación en acción en los aspectos de intercambio de información de agricultura ecológica. De manera similar, quienes se encargan del desarrollo de la tecnología agrícola y los agricultores deberían sentirse motivados a participar en el mejoramiento de la dimensión de comunicación.
La experiencia que vivimos sobre discusión en grupo, una vez más evocó en mí las diferencias de pensamiento que a menudo nublan las relaciones entre la ONG, el científico, el trabajador de campo y las comunidades agrícolas. Después de todo, estas son »culturas», que contrastan con sus propias lealtades y preferencias. Esperemos que reuniéndolas, la estrategia ILEIA pueda darles una oportunidad de trabajo para comprender sus diferencias y destacar sus objetivos comunes.
Nora Quebral
NCQ Development Communication Center (Centro de Comunicación para el Desarrollo)
Universidad de Filipinas
Los Baños, College of Agriculture, 4301 College
Laguna, Filipinas
