julio 2017, Volumen 33, Número 2
Producción de alimentos en sistemas resilientes al clima

Agricultura biodinámica en el fundo Orccococha, Ollantaytambo, Cusco

SILVIA CURE | Página 21-23
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El agricultor Dusan Luksic ha emprendido un interesante proyecto de agricultura biodinámica y nos relata las características de su experiencia: sus ventajas, sus necesidades y su situación en comparación con la agricultura convencional.

Cebada y habas. Silvia Cure¿Me puedes comentar sobre esta experiencia de agricultura biodinámica? ¿Hace cuánto tiempo has iniciado este proyecto? ¿Es un proyecto familiar?Sí, es un proyecto familiar que iniciamos hace casi tres años mi mujer y yo, cuando decidimos mudarnos acá. Hace veinte años mi papá quería tener un lugar en Ollantaytambo para recordar los momentos de su niñez con su abuelo, porque mi bisabuelo y mi abuela por parte de padre nacieron acá. Estuvo buscando hasta que alguien le pasó la voz de que el dueño de este lugar estaba vendiéndolo con la única condición de que no se convirtiera en un hotel y siguiera siendo una chacra. El terreno se compró y se mantuvo como chacra mientras estuvo mi abuela. Ella, además, se dedicó a la ganadería, llegando a tener unas 15 vacas. Mi padre iba y venía de Lima. Él realmente nunca tomó las riendas del proyecto; mi abuela estaba acá y veía todo, se dedicó a criar ganado para leche durante más de diez años. Cuando yo empecé a vivir acá puse en marcha un proyecto de agricultura orgánica. Después conocí lo que era la agricultura biodinámica e hice un curso modular en Argentina, que implementé acá cuando mi abuela se fue a Lima por su enfermedad.

¿Y hubo algún periodo de transición de la chacra de tus abuelos a la propuesta que tú trajiste de Argentina?

Claro, mi abuela hacía agricultura y ganadería convencionales. Ella sembraba pasto para las vacas pero de manera convencional. Cuando ella enfermó yo empecé hacer agricultura orgánica, dejando de usar químicos por completo, pero en ese momento aún no me había metido en el tema de la agricultura biodinámica; solamente era orgánica: hacía mi compost, abonaba con estiércol que compraba de otras granjas. Creo que el fundamento y elemento central de la agricultura biodinámica es que debe ser un proyecto integral, de manera que la finca sea, en la medida de lo posible, autosuficiente. Es por ello que cuando empecé con el proyecto biodinámico dejé de comprar estiércol y empecé a utilizar el de mis animales.

¿Qué fue lo que te motivó para llevar el curso o para aplicarlo al iniciar este proyecto?

En realidad creo que es algo que venía de mucho tiempo atrás porque yo estudié en una escuela Waldorf, donde la pedagogía está relacionada a la agricultura biodinámica; entonces yo ya sabía de la existencia de la agricultura biodinámica y siempre tuve curiosidad.

Fue en un viaje a la selva central cuando un cultivador de café me comentó que existía este curso porque, hasta ese momento, no sabía dónde podía estudiar, ni siquiera sabía que se podía estudiar… Me enteré del curso en un momento crucial de mi vida; estaba pasando por muchos cambios y se daban las condiciones para que yo estudiara, así que busqué el curso, me contacté con los organizadores y al día siguiente estaba viajando a Argentina. Fue rápido.

¿Qué productos tienes en tu chacra?

Es una chacra bastante diversa. De los frutales obtengo duraznos, manzanas, peras, paltas, sachatomate (Solanum betaceum), vainita, alcachofa, membrillo, higos, ciruelas. Tengo panales de abejas. Sin embargo, la mayor cantidad en producción son los cereales, de cinco hectáreas dedico tres a cereales. Los principales son el trigo sarraceno, también conocido como alforjón (Fagopyrum esculentum), el kamut (Triticum turgidum) y el centeno (Secale cereale) que destino a la venta. Un tercio de hectárea está cultivada con maíz para autoconsumo.

Con relación al destino de estos productos, ¿tienes contactos establecidos para entregar la producción semanal o mensual?

No ha sido fácil encontrar consumidores porque lo que nos interesa es tener un contacto directo. Es lo mejor, tanto para ellos como para mí. Ahora, por ejemplo, siembro los cereales para un amigo que hace panes con insumos orgánicos en Cusco; su empresa se llama Masa Madre. Otra parte de los cereales va a la Cervecería del Valle, elaboran cerveza artesanal y tienen el mismo interés que yo en consumir lo que los agricultores locales producen. Con las frutas elaboro mermeladas caseras y vendo principalmente a cuatro hostales en Ollantaytambo. Ellos me compran mermelada, leche y yogur. Tengo una vaca con cuya leche hago yogur.

¿La agricultura campesina tradicional de los Andes se puede considerar ecológica o biodinámica?

Yo diría que en la práctica la agricultura tradicional tiene coincidencias con la biodinámica, solo que la agricultura biodinámica tiene un fundamento más científico, ya que la tradicional se ha transmitido oralmente de generación en generación y las cosas se hacen de una determinada forma porque así lo hacían el abuelo y el bisabuelo, y resultaba.

¿Cuáles crees que son los problemas y los beneficios de la agricultura biodinámica para el ambiente y la producción y para la familia productora?

El beneficio es la salud. No hay nada que pueda ser perjudicial para la salud y, si vives con tus hijos, eso es muy importante.

¿Es posible apreciar cualitativamente y cuantitativamente estos beneficios?

Cualitativamente sin duda, pero cuantitativamente, si solo tomamos en cuenta el peso, no necesariamente. Por ejemplo, mis animales: comparados con los patos que están encerrados y que les dan los alimentos, los míos, que viven libres, pesan menos, pero el sabor no es comparable. En calidad sin duda es mejor, pero si solo te interesa el volumen, yo diría que en muchos casos es inferior.

Seguramente la forma de conducir esta chacra es beneficiosa en términos de salud ambiental y social pero, económicamente, ¿es rentable tener una chacra así?

Lo que suecede es que necesitas un respaldo económico que te permita aguantar unos años hasta que llegues a contactar con los consumidores que buscas. Por eso, cuando me preguntabas por los problemas, uno de ellos es encontrar consumidores que aprecien la calidad del producto, ya que generalmente lo que busca el consumidor es el menor precio. Yo he tenido la suerte de tener ese respaldo económico que me permitió aguantar para ahora empezar a ser rentable.

¿Hay alguna forma o mecanismo que tengas para medir lo que produces en tu chacra?

Cuando cosecho peso, mido el área en que he sembrado y peso. Espero llegar a un buen volumen de cereales y frutas, por eso sí, peso lo que cosecho.

Por ejemplo, ¿en el caso de las paltas?

Ese es uno de los productos que no consigo vender al 100%. Hay gente que me compra, pero hay una parte de la producción que no encuentra consumidor y se me queda.

He visto tu vaca, ¿qué otros animales tienes?

Una vaca que hace dos años tuvo una cría y que ahora tiene una segunda cría; tengo más de 40 patos, que es lo que más vendo de mis animales. También tengo algunas gallinas, gansos y pavos.

En cuanto a las personas que te ayudan…

Tengo un trabajador fijo y voluntarios.

Este terreno es bastante extenso, ¿necesita mucho trabajo?

Sí, yo trabajo todo el día, somos pocos para las cinco hectáreas que tiene Orccococha, sobre todo en la siembra o en la cosecha, que son tareas para las que necesito bastante gente para hacerlas en un solo día, porque no pueden demorar mucho. Aquí no es fácil conseguir trabajadores.

¿Te guías por los astros para el cultivo?

Existe el calendario biodinámico que es una orientación, un calendario de apoyo… Sí ayuda en los momentos de siembra y de cosecha, aunque depende de lo que vayas a sembrar y cosechar. Lo uso como una guía, pero hay momentos en que puedo contar con ayuda y aunque ese día no sea el mejor según el calendario, lo hago igual. En la medida de lo posible lo uso como orientación, pero me adapto a la disponibilidad y tiempo de los trabajadores.

¿Cuál es tu percepción respecto al cambio climático? ¿Estás adoptando algún tipo de medida?

Lo que hemos notado es que la radiación solar parece ser cada vez más fuerte y esa misma percepción es la que tienen todos los pobladores de la zona, además de que es un hecho que los nevados se están reduciendo cada vez más. En este sentido creemos que el centeno es una buena alternativa por ser una planta resistente a la sequía, que además se puede cultivar en terrenos degradados ya que no es muy exigente en cuanto a nutrientes.

¿Notas alguna diferencia entre la agricultura agroecológica y la biodinámica?

Para mí la agricultura biodinámica está dentro del movimiento agroecológico, donde encaja perfectamente. La diferencia es que la agricultura biodinámica tiene fundamento científico y espiritual, pero en cuanto a los componentes social y ecológico está totalmente dentro del movimiento agroecológico.

Dusan Luksic
Agricultor
Fundo Orccococha, Ollantaytambo, Cusco, Perú.
fundoorccococha@gmail.com

Entrevista realizada por Silvia Cure por encargo de leisa revista de agroecología.

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