Las variedades locales son desarrolladas por los agricultores durante muchas generaciones de selección, sin intervención de un fitomejoramiento formal. Numerosas variedades locales proporcionan seguridad alimentaria a mucha gente en los países en desarrollo y también actúan como principal fuente de material genético para las variedades modernas.
En 1995, el Instituto Internacional de Recursos Genéticos de Plantas (con las siglas IPGRI en inglés) junto con socios en nueve países, comenzó a explorar el potencial de conservación en – finca como parte de un proyecto global. La conservación \’in situ\’ es el mantenimiento de poblaciones de especies en sus hábitats naturales, ya sea como comunidades de plantas no cultivadas o en los campos de los agricultores, como parte de agroecosistemas existentes (Jarvis et al., 1997). El proyecto intenta desarrollar nuevos conocimientos sobre cómo es la mejor manera de llevar a cabo la conservación en – finca. Esto incluye un análisis de las formas en que se pueden desarrollar asociaciones sostenibles entre el sector formal y el informal.
Comprendiendo la situación
La conservación en las fincas es un proceso que genera diversidad. Comprende cuatro pasos distintos:
• flujo de genes de plantas silvestres a cultivos o flujo de semillas a través del intercambio de semillas;
• selección de variedades hecha por humanos;
• selección natural de variedades adaptadas a las condiciones locales;
• métodos de almacenamiento de semillas para evaluarlas después de la cosecha, y selección de semillas para la siguiente temporada de siembra.
Los sistemas tradicionales de abastecimiento de semillas son fuente importante de diversidad. La mayoría de los agricultores obtienen semillas de nuevas variedades de fuentes informales, generalmente dentro de su propia comunidad. Hay ejemplos de nuevas variedades muy difundidas que nunca fueron lanzadas oficialmente. Esto indica la importancia de los mecanismos de intercambio de semillas de agricultor a agricultor. Las personas que emigran, las que se casan fuera de la comunidad y las oportunidades de trabajo afuera juegan un papel importante en este intercambio de semillas, especialmente cuando se hace a grandes distancias, entre áreas aisladas por barreras geográficas o culturales. El intercambio de semillas, la introducción de nueva diversidad de los sistemas informales y las ferias de semillas incrementan el flujo de genes en las aldeas y satisfacen las necesidades inmediatas de los agricultores.
El flujo de genes a través del intercambio de semillas entre los sectores formales e informales, y a través de comerciantes locales de semillas, resulta en un sistema dinámico de abastecimiento de semillas. El número de variedades locales, variedades de los agricultores y variedades exóticas cultivadas en una determinada localidad, sus diferencias genéticas y el área que ocupan en el tiempo son factores importantes para una agricultura sostenible. La estabilidad de los rendimientos es un objetivo importante para los agricultores y un indicador de desarrollo agrícola sostenible. La estabilidad del rendimiento se asocia con la diversidad genética, porque actúa como amortiguador contra el estrés biótico. Un fitomejoramiento participativo crea nueva diversidad y da la oportunidad de transferir nuevas habilidades y conocimientos de mejoramiento, reforzando así, la conservación en la finca (Recuadro 1).
Cuadro 1. Función del agricultor y del fitomejorador durante un proceso de FMP
Amenazas
Los agricultores continuarán manteniendo variedades locales mientras les proporcionen beneficios, pero pueden elegir reemplazarlas con variedades modernas por alguna de las siguientes razones:
• mal rendimiento de las variedades tradicionales locales;
• falta de mercado para las variedades locales;
• susceptibilidad a enfermedades y a plagas;
• tasas de retorno económico pobres;
• características no deseadas, tales como el sabor;
• acceso a semillas de variedades modernas, a insumos y facilidades de crédito, y a apoyo técnico.
Necesitamos saber por qué los agricultores cultivan sus variedades locales y dónde y cómo las mantienen y usan. La Figura 1 muestra que los agricultores buscan nuevas semillas cuando sus variedades no rinden bien. Para que un agricultor mantenga y use variedades locales, los recursos genéticos de los cultivos deberán:
• competir con otras opciones disponibles para el agricultor; y
• proporcionar seguridad y posibilitar que el agricultor incremente sus ingresos.
Fitomejoramiento participativo (FMP)
Cuando en una etapa temprana de selección se cruzan variedades locales y variedades modernas, y hay una selección máxima de los agricultores que cultivan en las condiciones a las cuales está orientada la selección, entonces la estrategia de mejoramiento se parece mucho con la conservación genética \’in situ\’ de las variedades locales (Witcombe et al., 1996). Un enfoque de FMP usando variedades locales como la fuente de material genético para el mejoramiento de cultivos, simboliza un equilibrio entre los dos objetivos: el de mantener diversidad genética \’in situ\’ y el de mejorar la variedad según las necesidades de los agricultores.
El Cuadro 1 ilustra cuatro pasos fundamentales y los roles de los agricultores y fitomejoradores en el proceso de FMP. Este proceso ha sido documentado como un resultado de la interacción entre agricultores e investigadores en Nepal, y está siendo comprobado en el área del proyecto. El nivel de participación puede variar según la experiencia, habilidad, y capacidad de los miembros participantes. Cuando la Selección Participativa de Variedades (SPV) ha fracasado en identificar alguna variedad adecuada o si se ha identificado un nuevo problema en un cultivar, se necesita usar el FMP. Los ciclos de SPV y FMP se entrecruzan, pero tienen sus propios procesos diferentes.
Fortaleciendo la conservación en las fincas
¿Es que el FMP crea y conserva in situ la diversidad genética? ¿Incrementa el FMP los beneficios para los agricultores? ¿Cuál es el incentivo para que los agricultores colaboren con las actividades de FMP y de conservación en – finca? Si se da valor agregado a una variedad local en particular, ¿resultará en la difusión de esa variedad en detrimento de otras variedades en el sistema? Algunas de estas preguntas técnicas serán tratadas en el proyecto global de IPGRI en seis países.
Actualmente, la conservación en – finca está bajo el control de la comunidad agrícola. Si se refuerza la capacidad de los agricultores y de las organizaciones locales, se incrementará la conservación de los recursos genéticos en – finca, mejorando así los medios de vida de los agricultores. La conservación en – finca podrá ser reforzada a través de actividades en la comunidad agrícola, tales como ferias de diversidad, bancos comunales de semillas y FMP en las organizaciones de base (Figura 2). Sin embargo, se requiere más colaboración entre el sector formal de instituciones de recursos genéticos de plantas y los sectores informales, incluyendo organizaciones comunales (OCs). Por lo general, los fitomejoradores han subestimado, o ignorado, la habilidad de los agricultores y su conocimiento sobre el mejoramiento. Los agricultores, al igual que los fitomejoradores, tienen sus propios criterios de selección para evaluar nuevos cultivares.
La participación de la comunidad en el FMP en las aldeas ha dado poder a los agricultores. Los agricultores que participan en el FMP se benefician porque tienen acceso temprano a nuevos materiales, son reconocidos por la comunidad y aprenden nuevas técnicas de selección. En Nepal, los agricultores que participan en FMP han tenido éxito en vender las semillas de las nuevas variedades a precios más altos que los de las variedades locales (Sthapit et al., 1996). Los productos del FMP todavía están bajo el control del sistema informal de semillas. Aunque el proyecto no pretende dar recompensas directas a los agricultores, es importante que la inversión global y nacional en el bienestar de los agricultores sea vista como una compensación indirecta por el reconocimiento de su papel en la conservación en – finca. Este tipo de compensación indirecta puede llegar a más agricultores y por eso, podría ser más equitativa que un sistema de pagos a algunos agricultores. Por eso, el FMP puede incrementar la participación de la comunidad en el manejo de los recursos genéticos locales, haciendo buen uso de los conocimientos y habilidades de los agricultores para el mejoramiento de los cultivos.
Cuadro 1
Mejoramiento Participativo de Cultivos: definiciones
(Joshi y Witcombe, 1996; Sthapit et al., 1996; Witcombe et al., 1996).
Selección Participativa de Variedades (SPV)
SPV es la selección de líneas fijas (lanzadas al mercado, líneas avanzadas o variedades locales) por los agricultores en sus ambientes definidos, usando sus propios criterios de selección.
Para que la SPV tenga éxito, se deben llevar a cabo los siguientes cuatro pasos:
• identificación de las necesidades que debe satisfacer un cultivar para los agricultores;
• búsqueda de materiales adecuados;
• experimentación de su aceptación en los campos de los agricultores; y
• mayor difusión de los cultivares preferidos por los agricultores.
Fitomejoramiento Participativo (FMP)
El FMP es un proceso de mejoramiento en el cual los agricultores y los fitomejoradores juntos, seleccionan cultivares de materiales segregados en ambientes definidos.
Para que el FMP tenga éxito, deberá tener las siguientes características:
• comprender las razones por las cuales se cultivan diversas variedades;
• identificar a agricultores expertos, con habilidades para el manejo de la diversidad y para la selección de semillas;
• juntos establecer metas de mejoramiento (y funciones que deben cumplir los participantes) que satisfagan las necesidades de los agricultores;
• usar las variedades locales como material progenitor;
• selección descentralizada de líneas de segregación, por los agricultores:
• usar las observaciones y las opiniones de los agricultores;
• participación de los agricultores en todas las etapas de selección y evaluación;
• transferencia de habilidades y de conocimientos entre los fitomejoradores y los agricultores;
• evaluación y monitoreo de la diseminación de variedades por los científicos;
• usar sistemas informales de suministro de semillas para una mayor difusión.
B.r. Sthapit y D. Jarvis
BR Sthapit, International Plant Genetic Resources Institute (IPGRI)-APO (Nepal), 3/202 Nadipur Patan, Pokhara, Nepal. E-mail: B.Sthapit@cgiar.org
D. Jarvis, IPGRI HQ, Via delle Sette Chiese 142, 00145, Roma, Italia.
E-mail: D.Jarvis@cgiar.org
Referencias
Jarvis, D., T. Hodgkin, P. Eyzaguirre, G. Ayad, B.R. Sthapit y L. Guarino. 1998. Farmer selection, natural selection and crop genetic diversity: the need for a basic dataset, en Jarvis, D. y T. Hodgkin (editores) Strengthening the scientific basis of in situ conservation of agricultural biodiversity on-farm. Options for data collecting and analysis. Proceedings of a workshop to develop tools and procedures for in situ conservation on-farm, 25-29 de agosto de 1997, Roma, Italia, pp. 1.8.
Joshi, A. y J.R. Witcombe. 1996. Farmer participatory cultivar improvement II: Participatory Varietal Selection in India. Experimental Agriculture, 32: 461-478.
Sthapit, B.R., K.D. Joshi, R.B. Rana y A. Subedi. 1998. Spread of varieties from PPB in the high altitude villages of Nepal. LI-BIRD Technical Report Series 1997.
Joshi, K.D., M. Subedi, R.B. Kadayat Rana y B.R. Sthapit, 1997. Enhancing on-farm varietal diversity through participatory variety selection: A case study of Chaite rice in Nepal. Experimental Agriculture 33: 1-10.
Sthapit, B.R., K.D. Joshi, J.R. Witcombe. 1996a. Farmer participatory cultivar improvement: A case of high altitude rice from Nepal Experimental Agriculture 32: 479-496.
Witcombe, J.R., A. Joshi, K.D. Joshi y B.R. Sthapit. 1996. Farmer participatory cultivar improvement I: Varietal selection and breeding methods and their impact on biodiversity. Experimental Agriculture 32: 445-460.