Una importante enseñanza fue que las tecnologías transferidas de otras partes del mundo trabajan sorprendentemente bien. Pero su adopción sólo tuvo lugar después de desarrollar talleres participativos de elevación de la toma de conciencia, en donde los agricultores identificaron sus problemas y fueron alentados a experimentar y adaptar las opciones técnicas proporcionadas por el equipo de extensión.
El Distrito de Zaka, en Zimbabwe sudoriental, está conformado casi en su totalidad por tierras comunales. La agricultura de subsistencia es la principal actividad económica las especies cultivadas son maíz, maní, algodón, sorgo, mijo y girasol. Los suelos son generalmente pobres y arenosos, y la densidad de la población es de más de 65 personas /km2, que resulta muy alta para un área montañosa, de laderas escarpadas con muchas salientes rocosas.Hace cinco años, la ONG danesa MS-Zmbabwe y el Consejo del Distrito Rural de Zaka entraron en sociedad, con el objetivo de trabajar con agricultores comunales en la conservadón de los recursos naturales. La idea era introdudr una serie de opdones para CSA, muy diferente a la cobertura con surcos en contorno del pasado. El programa, ahora, es desarrollado ampliamente por las agendas de extensión del gobierno, las cuales sintieron fuertemente que era necesario un enfoque de extensión más orientado a la participación.
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Talleres para la identificación del problema |
Se organizaron talleres participativos tanto para las comunidades locales como para el equipo de extensión destinados a identificar los problemas del manejo de los recursos naturales. Los lugareños consideraron a la sequía, la erosión del suelo, la deforestación y la reducción de la fertilidad del suelo como sus problemas principales. El equipo de extensión vio que sus preocupaciones principales eran convencer a los agricultores acerca de la utilidad de los surcos de contorno, el evitar cultivos sobre las pendientes empinadas y el proveer soluciones a los problemas de la reducción de la fertilidad del suelo. Sobre la base de los resultados de estos talleres, se hicieron planes para un programa de tres años. Las opciones incluyeron franjas de contorno de pasto vetiver; contornos de Fanya Juu; hoyos de infiltración /compostera en drenes de contorno existentes; establecimiento de parcelas de bosque con Eucalyptus ssp. o especies nativas; plantación de huertos; manejo sostenible de bosques existentes; cultivos asociados y rotación de cultivos mejorada. |
Giras para Mirar y Aprender |
El Sr. P. lacobs, al extremo de la izquierda, está convirtiendo sus franjas de contorno estándar, convencionales, en cercos de contorno vetiver. De acuerdo a sus propias ideas, él ha plantado el cerco vetiver justo por encima del canal de drenaje (izquierda), de modo que cuando el borde esté bien establecido, él destruirá el dren y el lomo, lo cual liberará tierra para cultivo.
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Las Giras para Mirar y Aprender probaron ser la herramienta más eficaz para introducir estas tecnologías. Después de las primeras demostraciones, decidimos dejar que la transferencia de tecnología se diera no del tecnócrata al agricultor, sino de agricultor a agricultor.
Entre 1993 y 1995 un buen número de agricultores participaron en las Giras para Mirar y Aprender cerca a la Estación de Investigación Makoholi, donde se les ofrecieron algunas ideas sobre las tecnologías disponibles. Luego, cuando se iniciaron las actividades piloto en el distrito, estas visitas probaron ser muy valiosas. Hoy, los agricultores visitan las áreas piloto dentro del distrito en un entorno similar al propio y en donde los proyectos han sido iniciados por agricultores como ellos. Durante las visitas, los agricultores de las áreas piloto explican en sus propias palabras lo que han hecho, muestran cómo lo han hecho y demuestran lo que han logrado. Después de la excursión, los visitantes están usualmente muy ansiosos de comenzar sus propias actividades. Dado que la mayoría de las tecnologías son baratas y fáciles de usar, éstas pueden ser trabajadas inmediatamente. Apoyados por su equipo de extensión local, los agricultores pueden comenzar, por ejemplo, estableciendo un pequeño bosque o viveros de vetiver en sus parcelas y en las escuelas o prestándose herramientas para la excavación en trabajos de conservación.
Tecnologías populares
El programa está ahora en su quinto año y su éxito es evidente. Una tecnología extraordinaria, muy popular entre los agricultores, es el pasto vetiver (Vetiveria zizanioides), que el Banco Mundial ha promovido por muchos años como el «pasto milagroso» de la conservación. Tiene gran demanda en Zaka. El pasto es popular debido a que sus requerimientos de trabajo son pocos y, cuando se usa apropiadamente, por la velocidad a la cual se pueden alcanzar los resultados. Las mujeres que son cabeza de familia, particularmente, aprecian los bajos requerimientos de trabajo porque la fuerza de trabajo es un recurso escaso en esta zona .
Los agricultores, sorprendentemente, han tenido pocos problemas en poner en uso el concepto de contornos biológicos (franjas de pasto vetiver). La técnica de hacer contornos no es todavía popular y se considera que requiere un trabajo muy duro. El sistema Kenyan Fanya Juu, otra técnica, también se está generalizando debido a que demanda menos trabajo que los contornos convencionales.
Un éxito más amplio es el de los hoyos de infiltración, que es una mejora de las franjas de contorno existentes. También se puede hacer un buen abono en estos hoyos durante la estación lluviosa. Así, como muchas otras tecnologías CSA, los hoyos de infiltración o chibatamvura tienen más de una función.
Muchos agricultores han probado varias de estas opciones al mismo tiempo. Por ejemplo, las parcelas de agroforestería protegidas por los contornos Fanya Juu con franjas vetiver para controlar las erosión de la escorrentía al interior de la parcela o el uso de las franjas vetiver para controlar la erosión en los bosques existentes con el fin de proveer un mejor ambiente para la regeneración natural. Los mismos agricultores están decidiendo cómo llevar a cabo y combinar estas diferentes tecnologías y, al hacerlo así, asumen toda la responsabilidad de los resultados.
La cosecha del agua de lluvia es costosa
El agua de lluvia puede ser colectada debajo de la saliente de una roca y ser almacenada en un tanque para regar las hortalizas y árboles frutales durante la estación seca. Pero no siempre el agricultor puede permitirse esta tecnología costosa. El precio de un simple proyecto de cosecha de agua de lluvia con un tanque de 70-80 m3 es, aproximadamente, US$ 300. El programa ha financiado sistemas de cosecha de agua entre algunos agricultores que mostraron verdadero interés en conservar su tierra. Pocos agricultores prósperos han realizado proyectos de cosecha de agua sin algún programa de financiamiento. Se espera que, después, los pueblos o grupos de pobladores puedan adoptar colectivamente proyectos de cosecha de agua.
Conclusión
Un sistema de extensión convencional y «basado en paquetes» no parece ser capaz de movilizar a los agricultores. En Zimbabwe, con su larga historia de recomendaciones y una extensión de orientación compulsiva, el concepto de métodos participativos y la provisión de opciones tiene mucho potencial aun cuando las tecnologías que están siendo transferidas no sean totalmente nativas.
Para la regeneración de la tierra, el modelo de una familia ‘curiosa’
La regeneración del bosque de Saranga después de década y media. Un oasis en el desierto de Attappady. El mulching es un método importante en la agricultura natural.
Foto: ‘Sheree’ Padre
Cuando Gopalakrishnan y Vijayalakshmi compraron Sarang, su fundo de 16 acres, en 1982, éste era una tierra baldía, situada aproximadamente a 800 m, en las pendientes de tres colinas. La agricultura era imposible: la tierra estaba desnuda y erosionada. La única fuente de agua se estaba secando. Sarang está en la región Attapaddy en Kerala, India, y es un desierto generado por el hombre, a pesar que antes solía estar lleno de densos bosques húmedos. El gobierno ha invertido millones de rupias allí, en la construcción de franjas de contorno para la conservación del suelo y del agua, pero no ha sembrado ningún árbol.
Dos maestros quisieron comenzar una escuela alternativa para preparar a los jóvenes para la agricultura. La agricultura de subsistencia sería una parte importante del curriculum. Ellos necesitaban regenerar su tierra. Razonaron así: «Si la deforestación causó que las fuentes de agua se secaran, ¿lo contrario no podría rectificar el daño?» Ellos instalaron varios tanques de percolación y pidieron a sus vecinos que no dejaran al ganado pastar en su tierra. La pregunta era ¿cuánto tiempo tomaría para que el manantial renaciera?
¡La ‘madre naturaleza’ hizo su trabajo! Primero, el pasto, como la lantana, se hizo más abundante. Más tarde, el pasto dio paso a pequeños arbustos y árboles. Gopala y Vijaya no plantaron más de media docena de árboles en su fundo y una vez que no hubo interferencia humana ni animal, el bosque comenzó a crecer naturalmente. Las aves y el viento deben de haber ayudado a propagar los árboles. Seis años más tarde el manantial había renacido. Se construyeron varios diques de contención a través del valle para contener el agua del manantial.
Hoy en día, un espeso bosque de especies caducifolias cubre gran parte de Sarang. La hojarasca forma un piso grueso en el bosque y previene la erosión y aumenta la filtración. Debajo de este mulch, un suave suelo fértil se está reconstruyendo. La mala hierba, como lantana y eupatorium, abundante en los fundos vecinos, ha desaparecido. Cuando los árboles deciduos alcanzaron cierta altura, aparecieron árboles de hojas siempre verdes, como el palo de rosa.
Gopalakrishnan cree que la labranza, un método ampliamente usado, es inapropiado para estas áreas lodosas. El mulching es la técnica que ellos usan. Éste retiene la humedad, controla la erosión del suelo y facilita el crecimiento de microorganismos. Se cultiva el garbanzo verde (una leguminosas) para enriquecer el suelo. Hoy en día, Sarang tiene una buena capa de suelo que puede alcanzar profundidades de 30 cm. Los insumos externos son nulos.
Sarang contrasta grandemente con el resto de Attappady. Todo los cultivos son de secano. Cultivan mijo, banana, ñame de elefante, calabaza y sorgo. Existe una variedad de calabaza amarga y tomate silvestres que se reproducen y crecen sin ninguna atención. Gopala y Vijaya están convencidos de que los «agricultores tienen que adecuar sus papilas del gusto a lo que pueda cultivarse en el suelo». Su fundo es casi autosuficiente en granos y hortalizas, un logro raro en Kerala, donde los agricultores apuestan a producir cultivos de riego para la venta y terminan haciendo crecer desiertos.
Shree’ Padre, P.O. Vaninagar, via: Perla, Kerala, India-671 552
Setren Dreyer, Skellet 5, 2600 Glostrup, Dinamarca.